miércoles, 22 de diciembre de 2010

#43

Post Data


Arturo Ignacio:
Yo que desarme el lenguaje por ti y tú que rearmaste las palabras para ahorcarte, lástima que tus escaleras no le quitarían a nadie los 21 gramos.
Los gatos no vinieron de los ojos como esperabas, aunque el gesto este florido de espejos palpitantes. Los colores no se entienden sin el agua.
No te escribo hace años pero recién el viento dejo de deshacerme y volví para reclamarte, tu sabes, es mi tarea, para sugerirte que te embriagues entre alambres de nuevo.
Animar peldaños de vidas pasadas no es tarea fácil, caminar en rigor mortis por ataúdes colgando de tejidos salivares.

Con (algo que no se) se despide A.P

Pd: no puedo ser más clara.